Adhesión al Paro General de la CGT
Desde la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina (FTCIODyARA) informamos a las compañeras y compañeros trabajadores aceiteros y desmotadores, comisiones gremiales internas, delegadas y delegados de base y sindicatos adheridos, que nuestra organización gremial adhiere al Paro General de 24 horas dispuesto por la Confederación General del Trabajo (CGT) para el próximo jueves 9 de Mayo.
La FTCIODyARA así lo ha resuelto, por encontrarse afiliada a la CGT y por acordar con los motivos que impulsan la medida: la inmediata derogación del anticonstitucional DNU 70/2023 y el profundo rechazo contra la ley Ómnibus con sus regresivas Reforma Laboral y Paquete Fiscal que incluye la reinstalación del Impuesto a las Ganancias.
Las políticas del nuevo gobierno nacional amenazan todos los derechos sociales, laborales, sindicales y previsionales de la clase trabajadora argentina.
El DNU 70/2023 anunciado en diciembre pasado por el presidente Javier Milei derogó y modificó antidemocráticamente más de 300 leyes, afectando los pilares del estado de derecho. Mientras el capítulo laboral de ese DNU fue declarado inconstitucional e inaplicable por la Cámara del Trabajo, el resto se encuentra vigente, afectando derechos fundamentales como la vivienda, la salud y el ambiente.
La Ley Ómnibus, llamada “Bases” por el gobierno nacional, reincide en el intento del gobierno nacional de avanzar contra la clase trabajadora.
Incluye una regresiva Reforma Laboral a la que denominan “modernización”, pero que no ofrece más que retrocesos.
Deroga las indemnizaciones agravadas para las personas que trabajan y no son registradas.
Legaliza el fraude laboral creando una nueva figura de “trabajador independiente” por fuera de toda protección legal.
Amplía el período de prueba de 3 a 6 meses, y en algunos casos puede ser de 8 y hasta 12 meses, para atemorizar y disciplinar a las y los trabajadores.
El proyecto de ley, en el mismo sentido, favorece la discriminación y despidos por causa de origen étnico, racial, religioso, gremial, de salud, condición física, ideología u orientación sexual.
Favorece la tercerización y el sistema de contratistas. Su inmediata consecuencia será la multiplicación de siniestros laborales, porque el trabajador que teme la no renovación de su contrato temporal, acepta tareas riesgosas para su integridad y su vida.
Habilita a que mediante la negociación colectiva se creen Fondos de Cese Laboral. Se pierde así el efecto disuasivo de la indemnización por despido, cuya finalidad es la protección de las fuentes de empleo. También facilita los despidos en el Estado.
Incluye medidas que atacan directamente a las mujeres: durante el embarazo se podrá trabajar hasta 10 días antes del parto, lo que ahora sólo es posible si el parto se adelanta. Así, el empleador podrá “sugerir” a las trabajadoras que trabajen casi hasta parir.
También avanza contra los derechos de las y los jubilados con una reforma previsional que, entre otras consecuencias, dificultará enormemente la posibilidad de acceder a la jubilación a las personas asalariadas que no fueron registradas por sus empleadores o que fueron defraudadas por los mismos en sus aportes previsionales, lo que impactará sobre todo en las mujeres mayores.
Habilita las privatizaciones de empresas estatales estratégicas y la entrega de recursos naturales mediante un “Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones” (RIGI) que le dará nuestro litio, gas, petróleo y agua a multinacionales extranjeras con beneficios tributarios, cambiarios y aduaneros extraordinarios durante 30 años.
Legaliza un blanqueo de capitales que sólo favorece el lavado de dinero proveniente de negocios ilegales.
Incluye un Paquete Fiscal tan profundamente regresivo que baja el impuesto a los Bienes Personales, que pagan las 120 mil personas más ricas del país, y reinstala la cuarta categoría del Impuesto al Salario, mal denominado Ganancias, que se aplicará sobre los ingresos de 1.1 millón de trabajadoras y trabajadores, entre los que estaremos todas y todos los aceiteros y desmotadores. De esta manera, el gobierno de Javier Milei profundiza la desigualdad que ya veníamos sufriendo.
Este 9 de Mayo paramos en defensa de los salarios, las condiciones laborales dignas y todos los derechos de la clase trabajadora argentina.
Comisión Directiva
Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina
F.T.C.I.O.D y A.R.A.