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Comunicado de la F.T.C.I.O.D y A.R.A.

Reforma a la Ley de Riesgos de Trabajo: Más negocios para las ART, menos protección para los trabajadores

Lunes 20 de febrero de 2017 | El pasado miércoles 15, finalmente la Cámara de Diputados aprobó la Reforma a la Ley de Riesgos del Trabajo, impulsada por el Poder Ejecutivo Nacional, la Unión Industrial Argentina (UIA) y la Unión de Aseguradoras de Riesgos del Trabajo (UART). Dicho proyecto tenía media sanción del Senado, y coexistía con la vigencia del inconstitucional decreto 54/2017, que pretendió imponer por “necesidad y urgencia” los mismos cambios. Un verdadero mamarracho que daña nuestra democracia.

Se trató de una vergonzosa sesión legislativa, donde no faltaron acusaciones cruzadas al interior de la coalición gobernante, dado que en medio del debate se filtró que el PEN habría cambiado la forma de cálculo del haber jubilatorio, disminuyéndolo mediante una resolución de la ANSES. Aunque luego fue públicamente dejado sin efecto, en ese momento se utilizó para cambiar el foco mediático y político del hecho central de esa jornada: la ignominiosa entrega de la salud y vida de los trabajadores, a cambio de garantizar mayor rentabilidad empresarial y el negocio financiero de las Aseguradoras de Riesgos del Trabajo (ART). Ello incumpliendo el mandato constitucional del artículo 14 bis de la Constitución Nacional, que dice que las leyes asegurarán al trabajador “condiciones dignas y equitativas de labor”.

Tal como ya planteamos en nuestros últimos dos comunicados, el único objetivo de la Reforma del Ejecutivo es reducir la “litigiosidad” (esto es, el derecho de los trabajadores a reclamar lo que les corresponde frente a un daño) y ya no la “siniestralidad”. Es acabar con la mal llamada “industria del juicio”, verdadera industria del incumplimiento patronal.

Entre otras cuestiones, se dispone que los trabajadores deban transitar las Comisiones Médicas Jurisdiccionales que dependen de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo, como instancia administrativa previa, obligatoria y excluyente, en un procedimiento laberíntico, antes de hacer un reclamo judicial. A este procedimiento administrativo se lo hace más largo aún, agregándole instancias que no existían.

Pero si el trabajador no está de acuerdo con la decisión de las Comisiones o la propia ART apela, tampoco podrá recibir la indemnización que se le reconozca (que es irrenunciable según nuestras leyes, Constitución y normas internacionales con rango constitucional) sino que deberá esperar el resultado de un largo juicio.

Sabemos que ese procedimiento médico-administrativo ante las Comisiones Médicas fue declarado inconstitucional por todos los tribunales del país, desde la Corte Suprema de Justicia hasta los juzgados de todas las provincias y nación.

Las Comisiones Médicas de la Ley de Riesgos del Trabajo son órganos federales y administrativos, integradas por médicos, financiadas por las propias ARTs y con funciones jurisdiccionales. El sistema pone a profesionales del arte de curar a decir lo que es y lo que debe ser en derecho y justicia. De esta manera no se garantiza el derecho de defensa.

Según el texto aprobado, si el trabajador decide llevar a cabo un juicio, sólo lo puede hacer ante el Tribunal correspondiente al domicilio de la Comisión Médica. Y los peritos médicos que intervengan deberán integrar el Cuerpo Médico Forense, organismo que no está preparado ni tiene los recursos suficientes para intervenir en juicios laborales. Actuará como un embudo en el que se amontonarán los expedientes. A esto se le suman otras cuestiones procesales que exceden este comunicado. Lo que queda clarísimo es que lo único que se pretende es dificultar al extremo la posibilidad de acceder a la justicia.

Nunca nos vamos a resignar a esta realidad lamentable que nos quieren imponer, en la que el trabajo dependiente se cobra vidas. Diariamente trabajadoras y trabajadores sufren graves accidentes o enfermedades, los cuales serían evitables si las patronales invirtieran en prevención (cambios en la forma de producción, mejoras de maquinarias, eliminación de la tercerización, de la precarización, entre otras medidas posibles y necesarias), y si el Estado y las ART ejercieran su función de control.

Desde la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina reiteramos que estamos en presencia de un sistema que descuida la vida y salud de los trabajadores al colocar como gestores del mismo a aseguradoras que tienen intereses opuestos a los de las víctimas. Se desinteresa por la prevención, rechaza la cobertura de la mayoría de las enfermedades laborales, brinda prestaciones médicas deficientes, altas prematuras, se cubren deficitariamente los accidentes sufridos, se cuantifica en forma inferior las incapacidades, no se recalifica, etc.

Si se quiere reducir la “litigiosidad”, se debería atacar la causa que la genera: un sistema perverso que descuida la salud y la vida, y excluye la cobertura de las principales afecciones laborales. Y no obstruir el acceso a los tribunales, derecho humano fundamental. Esta ley, lejos de mejorar los múltiples aspectos críticos, lo que pretende es impedir que el trabajador o trabajadora dañados, puedan acudir a la justicia.

Ratificamos que tenemos una formidable herramienta en nuestro Convenio Colectivo de Trabajo 420/05 en materia de seguridad laboral: la constitución obligatoria de Comités Mixtos de Salud y Seguridad en el Trabajo en cada planta aceitera del país, con tutela gremial para los representantes obreros. Asimismo, en las Provincias de Santa Fe y Buenos Aires, también es obligatorio constituir los Comités en todos los establecimientos laborales por las leyes provinciales vigentes. Su importancia es vital, dado que prevé la participación directa de los propios compañeros quienes mejor conocen los riesgos que sufren en el trabajo.

Asimismo, tenemos el derecho de parar la tarea laboral ante un riesgo grave para la salud y la vida, hoy consagrado en el artículo 75 de la Ley de Contrato de Trabajo.

Llamamos a resistir esta reforma laboral mediante el accionar militante de los delegados de base y de los paritarios en los Comités Mixtos que hemos conformados en las plantas, a traves de la verdadera prevención y la permanente defensa de la salud obrera en los lugares de trabajo.

¡Basta de concebir a la salud como negocio! ¡Basta de muertes obreras!

Comisión Directiva

Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina

F.T.C.I.O.D y A.R.A.