Cierre del Congreso: “nos vamos a encontrar en la lucha”
El panel de cierre del 72° Congreso, originalmente sobre el Salario Mínimo Vital y Móvil y la negociación colectiva, se reconvirtió y extendió para incorporar el debate sobre la actualidad política del país, con un proceso electoral donde están en juego como nunca nuestros derechos laborales y sindicales, y el propio sistema democrático. Junto al compañero Secretario General Daniel Yofra y los asesores legales Miguel Fiad y Carlos Zamboni Siri estuvo presente el compañero Walter Correa, Secretario General de Curtidores y actual Ministro de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, que vino a compartir su mirada y reflexiones sobre los desafíos para el movimiento obrero argentino en la presente coyuntura.
Tras la presentación realizada por el compañero Miguel Ferreyra, Pro Secretario Gremial, abrió el panel una intervención del abogado laboralista Miguel Fiad, que interviene principalmente en las negociaciones paritarias de los convenios desmotadores.
“En primer lugar vamos hacer un comentario obligado de la paritaria de desmotadores de algodón”, planteó Fiad. “La idea originaria fue hablar más generalmente de la política del Salario Mínimo Vital y Móvil, pero la verdad que tal y como lo plantearon los miembros del MATE ayer, realmente se ve un salto importante en el salario de los desmotadores de algodón de un tiempo a esta parte y particularmente en los últimos dos años”.
El asesor legal resaltó que este salto en el salario de los compañeros y las compañeras desmotadoras de algodón tiene su correlato en la conformación del equipo paritario, con la participación de los asesores Carlos Zamboni, María Paula Lozano y dirigentes de la Federación, sumado a los paritarios propios de los lugares de trabajo en las distintas provincias, “nos ha permitido no solamente pelear en lo salarial, sino también empezar a avanzar en cuestiones no salariales como las condiciones laborales”, destacó Fiad.
“Al punto de haber incorporado este año no solamente un salto en el salario de un 130% anual, hoy el salario de desmotadores sumándoles todos los adicionales, pero un adicional que es absolutamente inmediato y automático, como es la productividad, con una lucha que se dio antes, en el 2010, cuando participó Carlos Zamboni y estuvo también Daniel Yofra en ese momento, ese 20% de productividad ya no es más un escalonamiento, sino que es un 20% automático y fijo. Solamente hablando de ese 20% de productividad, estamos en un salario de la última categoría de 382.000 pesos, por ejemplo. Es decir, si a eso le sumamos adicionales, podemos llegar a la última categoría, de cerca de 432.000 pesos”, remarcó.
“Esto quiere decir que históricamente nosotros teníamos una pelea de decir, nos acerquemos aunque sea una paritaria atrás de aceiteros. Hoy estamos a una revisión de aceiteros. Hoy estamos con un salario de junio de aceiteros, lo cual nos llena de orgullo, todavía no nos da una alegría completa porque queremos tener el mismo salario que los aceiteros. Todavía no nos da la fuerza, pero estamos hoy por hoy solo a una revisión de aceiteros, lo cual convierte a desmotadores de cada una de las provincias, sacando fundamentalmente Bancarios o alguna otra, en los mejores salarios de cada una de las provincias, de Santiago del Estero, Formosa…”
“Y esto ha tenido una repercusión en cada una de las provincias también con los referentes desmotadores de algodón en cuanto a la participación en las CGT locales, en la vida, digamos, del pueblo, los medios de comunicación, etc”.
“Dicho esto, y ya sin mucho tiempo más, y aprovechando para felicitar a mis compañeros y compañeras desmotadoras en esta última paritaria, quería hablar un poco de esto del Salario Mínimo Vital y Móvil que es logrado por la Federación Aceitera. Nosotros garantizamos, calculamos, primero calculamos con el equipo económico del MATE, calculamos cuál debe ser el Salario Mínimo Vital y Móvil, después lo peleamos y después lo conseguimos”.
“Ahora, el Salario Mínimo Vital y Móvil no tiene una dimensión individual. El Salario Mínimo Vital y Móvil fue concebido justamente como una dimensión colectiva. El Salario Mínimo Vital y Móvil fue conseguido como parte de un proyecto para salir de las crisis, y para salir de las crisis a través del salario de los trabajadores y de las trabajadoras”.
“Anoche, hablando mucho con Eugenio Biafore, que es un estudioso, digamos, de la composición fundamentalmente del mercado de trabajo. Él me transmitía sus conclusiones, yo ahora le pongo mi impronta de la que quería hablar, que es parte de todo lo que estuvimos hablando estos días sobre la desigualdad, esta contradicción de que exista un trabajador pobre. O sea, si hay salario no debería haber pobreza. Eso es no solamente lo lógico, sino para lo que fue concebido el salario, no solamente para no ser pobre, sino para tener una vida digna y todo lo que ustedes ya saben”.
“Digo, si nos paramos solo en el mundo que nosotros conocemos, solo en el mundo de los trabajadores asalariados, me contaba Eugenio, tenemos nueve millones de trabajadores asalariados registrados. Si le sumamos los trabajadores asalariados no registrados, en negro que se le dice, tenemos que sumar cinco millones y medio más de trabajadores. Nosotros tenemos un universo que conocemos, que somos parte de él, que son nuestros compañeros y nuestras compañeras, de 14,5 millones de trabajadores y de trabajadoras. Los cuales, digo, pertenecen al mismo mundo que nosotros y deberían tener las mismas herramientas que nosotros para lograr un Salario Mínimo Vital y Móvil como nosotros. ¿Por qué? Porque tienen sindicatos, o deberían tenerlo, hay una decisión de algunos sindicatos de no representar a los no registrados o de no representar ciertos sectores de la precariedad, pero son asalariados de rama de actividad que tienen sindicatos, que también tendrían que tener el derecho de tener una negociación colectiva, que también tendrían que tener el derecho de ir a la huelga como herramienta dentro de la negociación colectiva para realizar ese salario. Bueno, ese universo no tiene el Salario Mínimo Vital y Móvil”.
“Nosotros podemos propagandizar el Salario Mínimo Vital y Móvil, y propagandizar la lucha por el Salario Mínimo Vital y Móvil, pero hay un instituto creado con la responsabilidad de fijar el Salario Mínimo Vital y Móvil en la Argentina que es el Consejo del Salario Mínimo Vital y Móvil, creado por la Ley 24.013, en el cual está integrado por 16 miembros de los trabajadores y 16 miembros del sector empresario, de los empleadores, y ese Consejo del Salario Mínimo Vital y Móvil fue creado ¿para qué? Bueno, para fijar un salario mínimo que atraviese a toda la clase trabajadora, que atraviese mínimamente a estos 14,5 millones de compañeros y de compañeras. Y sin embargo cuando se juntan, dicen que el Salario Mínimo Vital y Móvil en octubre debe ser de 132.000 pesos, en noviembre debe ser de 146.000 pesos y en diciembre llegar a los 156.000”.
“O sea, en diciembre los aceiteros cobramos 500.000 pesos, los desmotadores de algodón 382.000 y podríamos llegar a los 432.000 si le agregamos ciertos adicionales. Esa brecha que hay entre el salario mínimo que nosotros conseguimos y el salario mínimo que este Consejo del Salario establece, esa brecha es lo que la adquisición por parte de todos estos trabajadores de un salario como el nuestro achicaría absolutamente, y saben que se generaría solamente con este sector, siempre reconocemos y recordamos aquel fifti-fifti, aquella época del país en la cual el 50% lo llevaban los compañeros y las compañeras trabajadoras y el 50% el capital, las empresas. Bueno, solamente aplicando el Salario Mínimo Vital y Móvil ya no sería un 50 sino que sería un 54% de la torta que se llevarían los trabajadores”.
“Y también hablaba con contadores y me decía, bueno, o con economistas o con otros compañeros, bueno, pero si subís tanto el Salario Mínimo Vital y Móvil, corrés el riesgo de generar también una subida del piso de las Ganancias porque entonces terminará perjudicando a otro sector porque sube las Ganancias que son 5 salarios mínimos vitales y móviles. Bueno, habrá que modificar la ley de Ganancias, pero tampoco podemos seguir aceptando legislación que contribuya a ponerle la pata arriba al Salario Mínimo Vital y Móvil”.
“Y digo, hasta aquí esto, creo que nosotros podemos con gobiernos más compañeros, gobiernos más cercanos a la clase trabajadora, ir con una propuesta concreta porque para que estos… Y solamente al mundo que conocemos, ¿eh? Todavía no pusimos una pata en la economía informal, en la economía social. Solamente estos 14,5 millones compañeros y compañeras trabajadores asalariados, bueno, tenemos que proponer que haya un plan de regularización nacional y en ese plan de regularización nacional del trabajo tienen que estar los sindicatos y el Ministerio del Trabajo y es la primera medida en la cual esa brecha salarial, esa brecha de injusticia, esa brecha de pobreza, esa brecha de hambre que hablaba la compañera colombiana ayer se va a reducir. Muchas gracias, compañeros”.
A continuación intervino el abogado laboralista Carlos Zamboni Siri, que participa activamente en las negociaciones paritarias aceiteras tanto como las desmotadoras. Al igual que Fiad, decidió hablar sobre la actualidad y en este sentido, la necesidad urgente de mejorar las condiciones de vida de la clase trabajadora, y la importancia de la lucha sindical para lograrlo. También reflexionó sobre el posible escenario futuro y la importancia de estar preparados para defender los derechos laborales.
“Yo también me voy a referir un poco más a la actualidad que a lo que me pide la mesa”, comenzó Carlos Zamboni, “porque después de toda la jornada de ayer y de lo que escuchamos hoy, de las intervenciones de todos los compañeros y compañeras, ponernos a, digamos, a pensar en lo que fue la última paritaria aceitera, el éxito que conseguimos en el último reajuste salarial… ya estuvieron Martín Morales antes, Daniel, contando un poco de eso. Venimos de derogar, de alguna manera, el impuesto al salario, ¿no? No más el impuesto a las Ganancias, el impuesto al salario. Es decir, me parece que eso lo tenemos todos presentes, ha sido un éxito más, que quizás no lo esperábamos tan rápidamente, pero creo que demuestra que las condiciones materiales de vida de la clase trabajadora, como decimos en la última nota que escribimos con Matías en el periódico de la Federación, han irrumpido en la realidad, para sorpresa de muchos y de muchas”.
“Parecía que la condición de vida de la clase trabajadora no influía en la política, en la vida cotidiana de la sociedad, y de golpe, en las PASO nos encontramos hablando de que esas condiciones de vida, ¿no? ese 30% de trabajadores no registrados, ese porcentaje de trabajadores en la economía social, como le dicen ahora, todo ese sector de la clase trabajadora que se siente defraudado por los últimos años de la vida, que no ha mejorado su condición de vida, irrumpía en una realidad que nos llevaba a un candidato, a Milei, a ganar las PASO”.
“Y esa condición de vida tiene otra cara, que hoy señalaba el compañero del sur del país, ¿no? Y la otra cara del trabajo es el capital, y ahí tenemos que pensar en la distribución del ingreso que señalaban los compañeros del MATE, y que nos mostraba cómo el capital y los sectores, los grupos económicos de este país se han apropiado de una actividad económica que en los últimos años, también hay que decirlo, ha mejorado por lo menos desde el 2019 para acá. La salida de la pandemia nos muestra que se ha creado empleo, algo decía Miguel y algo se decía ayer. ¿Qué tipo de empleo? Bueno, hoy hay 6% de desocupación en la Argentina”.
“La economía argentina en los últimos años ha mostrado niveles de actividad que inclusive nos han sorprendido también, ¿no? El 6% de desempleo actual es una de las cifras más bajas en la historia de la Argentina, pero bueno, ¿qué tipo de trabajo se ha creado? Es la pregunta en estos años”.
“Entonces, de esos 1.5 millones de nuevos empleos que se crearon desde la salida de la pandemia acá, el 37%, efectivamente, como señalaba recién Miguel, son trabajadores registrados. El 40% es ese empleo no registrado y el 23% restante son trabajadores no asalariados, monotributistas, de la economía social. Lo cual nos lleva a que este país, como se ha señalado a lo largo de ayer y de hoy, sufra nuevamente un problema que es el de trabajadores pobres, es decir, lo que era la posibilidad de salir de la pobreza para cualquiera trabajadora o trabajador argentino a lo largo de la historia del país, hoy parece ser una nueva condena a seguir siendo pobre”.
“Y ahí me parece que tenemos que pensar cuál es el rol también de los sindicatos, ya que también hablamos tanto de qué es lo que vamos a hacer como sindicato, ¿no? Recién termina una mesa, digamos, que no es casual, conformada por dirigentes de la zona de San Lorenzo y de Puerto San Martín, ahí donde estaba la cabeza de la serpiente roja, pasando por Rosario, Arroyo Seco y llegando a Villa Constitución, donde estaba la cola de esa serpiente roja de los 70. Inclusive tampoco es casualidad que Horacio, Secretario General de los docentes de Ushuaia, tenga un pasado de obrero metalúrgico en el 95, que es algo que él no contó, que haya sido delegado de la UOM y compañero de Víctor Choque, asesinado en las tomas de fábrica de los 90 allá en Ushuaia. Y me parece que ese es el camino del sindicalismo”.
“Ahora, muchos podemos esperar, y ojalá sea así, y no me voy a referir porque ya todos lo han hecho, el gobierno de Massa que esperemos que gane. Ahora, tenemos que preguntarnos qué es lo que vamos a hacer los sindicatos, porque quiénes son también responsables de las condiciones de vida de la clase trabajadora en la Argentina. Nosotros, los sindicatos y los sindicalistas, somos los principales responsables de que el salario de los trabajadores registrados no alcance para cubrir, no el Salario Mínimo Vital y Móvil que cubra la educación, la vivienda, sino ni siquiera alcance para cubrir la línea de la pobreza”.
“Entonces, ante los desafíos que vienen, las posibilidades que se abren a partir del año que viene, hay dos caminos. Ojalá que sea el del triunfo de Massa, pero si fuera el otro camino y todos pensamos que no va a ser así, vamos a estar en una peor situación sin lugar a duda, en una etapa que rápidamente nos va a llevar, y como decía hoy Piparra, qué pasa si se abren las importaciones y entra el metal chino en la Argentina. Bueno, rápidamente vamos a ver de nuevo el ejército desocupado de los cordones industriales, de Villa Constitución, de Rosario, de la Zona Norte, es decir, vamos a estar una vez más como estábamos en los 90. Porque cuando se reivindica el menemismo, lo que no se recuerda es que había un 35% de empleo no registrado y 35% de desocupación. Y que desde el 91 al 2001, la productividad del capital creció un 20% y el salario real cayó”.
“Todos o muchos de acá podemos recordar qué eran esos planes de los 90 de lucha contra la hiperinflación, que nos promueven los mismos economistas que estaban, Roque Fernández y otros que hoy están en el equipo económico de Milei, donde se prohibían los aumentos salariales si no había incremento de la productividad, el decreto 1334 del 91, cuando venía el movimiento obrero de un proceso hiperinflacionario como fue el del final de los 80, pero donde todavía, inclusive en ese momento, el movimiento obrero tenía la fuerza para ir a discutir paritarias cada 15 días y mantener un salario que no era un salario de pobreza como tiene hoy la mayoría de las clases trabajadoras registradas, afiliadas a un sindicato que discute cada 2 o 3 meses en paritaria cuál es su salario”.
“Y por el otro lado, si lo que nos van a promover, y ojalá que sea así, es un gobierno de Unidad Nacional en el que vamos a tener que ir a un pacto social, vamos a partir de un nivel salarial que está igual o peor que el que dejó el gobierno de Mauricio Macri y en el que la clase trabajadora no puede poner todas sus esperanzas en un partido político o en un funcionario o en un Presidente, porque lo que necesita un gobierno para ser realmente nacional y popular, es que la clase social vaya a presionar ahí donde tiene que ir a presionar y donde tiene que presionar a la clase trabajadora es en la relación capital-trabajo y hoy en la Argentina, el que se han beneficiado en estos últimos años, es el capital”.
“Vemos cómo ha crecido la productividad, cómo se ha recompuesto después del mcrismo, del nuevo intento de desindustrialización que fue el macrismo en la Argentina, cómo el capital, todo el capital concentrado, las multinacionales y los restos de la burguesía nacional y los pequeños empresarios, cómo han reconstruido sus tasas de ganancias a costa de la caída del salario de los trabajadores y las trabajadoras”.
“Pese a que los aceiteros pelean, pese a que la UOM Villa pelee, pese a que muchos sindicatos den la pelea, la realidad nos demuestra que tenemos una deuda pendiente desde los sindicatos y es reconstruir el salario de los trabajadores. No podemos esperar, pretender que eso sea una bendición que caiga de un nuevo gobierno que ojalá sea el gobierno que todos queremos. Lo tenemos que exigir, ¿a quién? Y principalmente a los patrones, que son los que se llevan y los que se han apropiado de la recomposición de la actividad económica como lo veíamos ayer con los informes de los compañeros del MATE”.
“Entonces, cuando pensamos los desafíos que tenemos por delante, bueno, yo creo que hemos escuchado a los compañeros de Italia, a los compañeros de Latinoamérica, esta nueva ola de reformas laborales que tienen inclusive el voto de las sociedades en las que vivimos, nos lleva a pensar que la relación capital-trabajo va a volver a ser, ¿no? como decían ayer, como lo de la Forestal, eso es lo que pretenden. Bueno, tendremos que nosotros recuperar la herramienta de la vieja clase trabajadora, organizarnos nuevamente donde podamos, en los lugares de trabajo, en la zona, en los cordones industriales, participar de las centrales pero no dejar nunca lo que me parece que en una sociedad, en una economía altamente inflacionaria como la de hoy, con los niveles de actividad que tenemos, que es la lucha económica y la lucha salarial en todos los lugares, tanto en el sector privado como en el Estado, como bien decían los compañeros que estuvieron antes”.
“Entonces, en ese sentido me parece que la etapa que viene nos tiene que encontrar peleando con los patrones, adentro de cada uno de los lugares de trabajo, como siempre hizo el movimiento obrero organizado en la Argentina, absolutamente siempre, los momentos de mayor actividad de la lucha de clases, fue con un gobierno peronista, desde la primera presidencia de Perón hasta la última presidencia de Perón. Pensar que hacer huelga es hacerle huelga a un gobierno es desconocer la propia historia del movimiento obrero argentino. Las huelgas se las vamos a hacer a los patrones y a los gobiernos les vamos a exigir que nos permita pelear con los patrones para reconstruir la clase trabajadora y que una vez por todas este país vuelva a ser lo que alguna vez fue y le dé a cada uno de los trabajadores y trabajadoras lo que es su derecho, una vida digna, nada más”.
Posteriormente, tomó la palabra el compañero Walter Correa, tras una presentación en la que Daniel Yofra le agradeció su presencia y recordó a las y los presentes que es Secretario General de Curtidores, actual Ministro de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires y también referente en el Frente Sindical para el Modelo Nacional (FreSiMoNa).
“Compañeras y compañeros, en principio agradecerle a Daniel, a todo este colectivo, a toda esta Federación, la invitación y poder estar acá con ustedes”, comenzó hablando Walter Correa, “y compartir un momento, un alto en el camino, porque todos estamos en una batalla electoral y hoy nos hacemos un tiempito para escucharnos, para reflexionar. En principio, quiero traerles el saludo de nuestro gobernador, Axel Kicillof, que hace muy buen trabajo. Y la verdad que estaba escuchando atentamente acá al compañero, así que voy a seguir con esa misma línea porque estoy de acuerdo con lo que él plantea”.
“Y voy a retomar algunas palabras que él le hizo mención y bueno, avanzar en destacar el hecho de que nosotros tenemos muchos compañeros y muchas compañeras presentes en este Congreso de recambio generacional. Y como militante peronista, como militante sindical, nos vemos con la obligación de hacer ese repaso en el alto del camino de la historia, de la historia contemporánea del movimiento obrero organizado. Y decirles que en el ’76 hubo una dictadura sangrienta, 30.000 compañeros detenidos desaparecidos, 7 años de dictadura militar. Se cayeron todos los convenios colectivos de trabajo, se cayeron las paritarias, sindicatos intervenidos. Más del 60% de los compañeros detenidos desaparecidos eran como nosotros, trabajadores y trabajadoras que defendían los derechos de sus compañeras y compañeros”.
“Luego vino una democracia recuperada, ¿no? Recordarles a los compañeros que después de 30.000 compañeros detenidos desaparecidos, es el movimiento obrero que en el ’79 enfrenta a esa dictadura militar sangrienta, donde nos habían sacado los derechos y también nos habían sacado el ejercicio de discutir las paritarias. En los 80, la democracia incipiente, la democracia donde hay una cuestión que hasta hace muy poco nosotros la escuchábamos en el año 2016, ustedes escuchaban que decían, che, ganó el macrismo, entonces hay que darle gobernabilidad. Fue con la línea que decía acá el compañero, ¿no? Démosle gobernabilidad porque ellos ganaron, entonces era como algunos y algunas miraban hacia el costado cuando se trataba de defensa de los derechos de los trabajadores y las trabajadoras”.
“Y nosotros tuvimos un compañero que no priorizó la cuestión de la gobernabilidad, priorizó los derechos de los trabajadores y las trabajadoras en los 80, que fue el compañero Saúl Ubaldini, que encabezó todas esas luchas en defensa del interés en la clase. Y era muy difícil también el tema de los incrementos salariales, ¿no? Los milicos se juntaban en la dictadura, hacían un decreto y cuando a ellos les venía la gana aparecía un aumento de los salarios. Y después en los 80 había un mix, ¿no? El Ejecutivo a veces tiraba un aumento, después nosotros recomponíamos la situación salarial conforme a cómo negociábamos con las cámaras”.
“Hay una película ahora de 1985, donde habla de ese proceso donde se juzgó a las Juntas militares, donde la democracia incipiente juzgaba a aquellos asesinos, torturadores. Y a esa película, obviamente le falta un pedazo a esa película, que es la lucha de los trabajadores y las trabajadoras en la calle, en defensa de los intereses de la democracia, en defensa de los intereses del pueblo. Y en ese año, 1985, también se discutían los salarios en la calle Callao, en el Ministerio de Trabajo, en el sexto piso. Y punto por punto se discutía. Y si alguno alzaba la voz o se plantaba con la Cámara, tenía dos caminos. O iba a la Décima o iba a la Novena. Porque en esas audiencias había un vigilante uniformado con el arma reglamentaria. Así se discutían los salarios de los 80 y esa era la situación”.
“Y después en los 90, como decía muy bien el compañero, este decreto que anulaba la posibilidad de recomponer los salarios. Es más, el artículo 10 de la Ley de Convertibilidad prohibía indexar los salarios y prohibía incrementarlos si no era a través del incremento de producción. Por eso después, en el 2001, cuando todo estalla, los trabajadores y las trabajadoras nos quedamos con unos índices de productividad muy altos y con los salarios por el piso. Esa era la realidad”.
“Y en esto voy a hacer una reflexión para los compañeros y las compañeras del recambio generacional, muchos de los que están acá, hoy con nosotros. Después vino el año 2003. Vino el compañero Néstor Kirchner, que confió en la clase trabajadora y devolvió con un decreto, el 392 barra 03, y le devolvió a los trabajadores y a las trabajadoras a través de sus organizaciones sindicales, las paritarias. Este año, compañeros y compañeras, cumplimos 20 años de ese 2003 que Néstor Kirchner nos devuelve las paritarias”.
“Esta lucha de tantos años, este ejercicio de tantos años, no se la podemos regalar al loco de la motosierra. No se la podemos regalar. Tenemos que seguir luchando, tenemos que seguir peleando”.
“También otra cuestión que a mí tocó en la Cámara de Diputados de la Nación con respecto al impuesto a las Ganancias, al impuesto al trabajo. Y también me siento con la obligación de hacer ese repaso a través de la historia para los compañeros y las compañeras”.
“La verdad que Perón, cuando vuelve Perón, esto que hablaba acá el compañero del pacto social, del acuerdo social; cuando vuelve Perón después de que una resistencia de 18 años, con una fuerte centralidad de la clase trabajadora, con una fuerte organización de la clase trabajadora, después de fusilados, perseguidos, proscriptos, vuelve Juan Domingo Perón y plantea el pacto social, plantea el acuerdo social. Y Perón dice, necesito 20 leyes para acordar esto del pacto social. Y una de las leyes que se votó el 27 de diciembre de 1973, miren qué aplicados eran los diputados de esa época, porque es difícil encontrar en diciembre a los diputados y diputadas, votan la cuarta categoría. ¿Por qué votan la cuarta categoría? Porque había una obsesión de Juan Domingo Perón que decía y verificaba, a muchos la recordarán, Pérez Companc, esa gran compañía Pérez Companc. El hijo y la hija de Pérez Companc eran asalariados. Y en la sumatoria de los salarios del hijo y la hija de Pérez Companc, la sumatoria anual era superior a la ganancia de la empresa. Entonces Juan Domingo dijo, no, cuarta categoría, porque están evadiendo, están estafando al Estado. Y obviamente que eso se votó”.
“Y después vino la dictadura militar, las políticas neoliberales de Martínez de Hoz, impuestas a sangre y fuego, los 80, una democracia acorralada incluso por los sectores de la derecha a través de los milicos, porque en el 87 hubo una intentona de Golpe de Estado y fueron los trabajadores y las trabajadoras las que fueron a defender en la puerta de los cuarteles la democracia”.
“De la misma manera pasó en los 90, Seineldín, 3 de diciembre de 1990, también fueron los trabajadores y las trabajadoras a defender la democracia. Vinieron los 90, la tabla de Machinea, la Alianza, y eso se distorsionó para el carajo y empezamos a pagar el impuesto al trabajo. Y en las luchas históricas en los 90, tanto la CTA, tanto el MTA, no reclamábamos el impuesto a las Ganancias. La verdad que aprendimos en su mayoría a saber lo que era el impuesto a las Ganancias cuando lo empezamos a pagar, porque Néstor había levantado la situación salarial, teníamos los mejores salarios hasta 2013, 2014, de la región”.
“Y después fue todo un proceso, y del 73 hasta la fecha pasaron 50 años compañeras y compañeros. Y nosotros en este alto del camino, después cuando tenemos que volver al impuesto al trabajo, le podemos decir con firmeza, con certeza, con convicción a nuestros compañeros y a nuestras compañeras que nuestro ministro de Economía, nuestros candidato a presidente, Sergio Massa, después de 50 años nos sacó el yugo del impuesto al trabajo, compañeras y compañeros”.
“Les agradezco mucho la oportunidad que me dan, como un compañero más, de poder traer estos disparadores para discutir y para debatir. Y obviamente el proceso democrático. El proceso democrático es el proceso en estos 40 años, con errores, con aciertos, con sacrificios, pero siempre el sistema democrático. Como lo demostramos en el 85, como lo demostramos en el 90, como lo demostramos en el 2001, cuando nosotros, la clase trabajadora empezó a mirar las patas de los caballos de la Federal avanzando sobre las Madres de Plaza de Mayo, y ahí estuvo la clase trabajadora definitiva”.
“Entonces esta democracia la sostenemos, la reforzamos, la bancamos, la clase trabajadora, son los trabajadores y las trabajadoras. El ejemplo claro y conciso, la pandemia mundial. No vinieron los superhéroes, los superejércitos, fueron los laburantes de la salud los que pusieron el cuero, el pecho y la sangre en la defensa de la salud de nuestro pueblo”.
“Por eso estos 40 años de democracia, tampoco se los podemos regalar al loco de la motosierra, compañeras y compañeros”.
“Y esto que decía acá el compañero, el gobierno hacia dónde vamos, obviamente que tenemos que sostener y seguir discutiendo las paritarias, pero nosotros somos peronistas, y el objetivo del pueblo trabajador peronista es volver al 50-50, volver a 50 por cierto y la distribución justa, justa para la clase trabajadora”.
“Y nada, agradecerles, agradecerles la posibilidad y la oportunidad, felicitarlos por el hecho de esto, de que esta impronta que tienen los laburantes, esta impronta que tienen los trabajadores y trabajadoras en un ámbito de debate, donde tenemos la posibilidad de discutir, debatir y mirarnos a los ojos. Y saber que como movimiento obrero, saber como organización sindical, que no hicimos todo lo que teníamos que hacer, pero hicimos todo lo que pudimos en estos cuatro años. Y ese es el orgullo que tiene esta organización sindical, esta Federación y la clase trabajadora”.
“La clase trabajadora es la que hoy está motorizando en la campaña. ¿Por qué? Porque se puso agenda del pueblo trabajador. Por eso, compañeros y compañeras, no respetemos ni pelo ni marca y ganemos el 19, que es la posibilidad de volver a soñar, de volver a tener una esperanza para el pueblo argentino. Muchas gracias”.
“La Federación va a seguir con la misma política”
Las palabras finales estuvieron a cargo del compañero Secretario General, Daniel Yofra, que le dio un cierre a este gran 72° Congreso:
“Bueno, muchas gracias Walter, muchas gracias a todos los compañeros que están en la mesa. Yo voy a cerrar este Congreso, el objetivo es siempre el mismo, ayudarnos a pensar, decidir qué es lo que vamos a hacer en el futuro, más allá de analizar el pasado y el presente. Sabemos muy bien el compromiso que tenemos hacia la clase trabajadora, los y las compañeras dirigentes, y obviamente me gustaría que ustedes le puedan decir a sus compañeros y compañeras en las distintas fábricas, en los distintos establecimientos, que esta Federación en su gran mayoría, que tengan libertad de votar, pero esta Federación en su gran mayoría quiere que gane Massa”.
“Consideramos sin condicionamiento, los condicionamientos seguramente los vamos a poner la clase trabajadora después del 10 de diciembre para seguir peleando por los trabajadores, para seguir peleando por el Salario Mínimo Vital y Móvil de acuerdo a lo que establece la Ley de Contrato de Trabajo y el 14 Bis de la Constitución, en donde garantice esas 9 necesidades que son tan fundamentales y tan importantes para la clase trabajadora”.
“Seguramente nos vamos a encontrar en la lucha, seguramente vamos a seguir haciendo huelga como lo venimos haciendo de muchos años, seguramente vamos a estar en la calle discutiendo todo lo que haya que discutir para, como decía Walter, recuperar todo lo que el gobierno militar nos sacó y que en 40 años de democracia no lo hemos podido resolver. Así que les agradezco mucho, compañeros y compañeras, díganle a los compañeros en las fábricas que la Federación va a seguir con la misma política que viene teniendo desde hace muchos años y que es defender a los compañeros y compañeras en todo lo que sea necesario para que tengan una vida digna, no solamente los trabajadores, sino sus familias. Muchas gracias”.