Viernes 26 de mayo de 2017 | Desde la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina expresamos nuestra mayor solidaridad con Javier Esponda, delegado de la Línea 60 cuya vivienda familiar sufrió un ataque incendiario, y con Damián Straschenco, secretario adjunto del gremio de Luz y Fuerza de Zárate y trabajador de Atucha, quien fue deliberadamente envenenado con material radiactivo en su lugar de trabajo, afectando gravemente su salud. Exigimos el inmediato esclarecimiento de ambos hechos y el resguardo de la integridad psicofísica de los compañeros.

El ataque contra la vivienda de Javier Esponda, donde vive con su mujer e hijos, ocurrió en la madrugada del domingo 21 de mayo y se da en el marco de una prolongada situación de conflicto, donde los trabajadores de la Línea 60 denuncian las lamentables condiciones de seguridad laboral que se cobraron en septiembre pasado la vida de David Ramallo, quien murió mientras reparaba un colectivo. La patronal de la empresa DOTA respondió a las denuncias con despidos y el procesamiento de cuatro trabajadores.

En tanto que en Zárate, el sindicato Luz y Fuerza, integrante de FeTERA-CTA Autónoma, viene desarrollando una lucha contra las iniciativas de la empresa Nucleoeléctrica Argentina Sociedad Anónima (NASA) por flexibilizar las condiciones de trabajo en la central nuclear Atucha. El martes 9 de mayo, tras su jornada de trabajo el Secretario Adjunto Damián Straschenco fue alertado por los portales de medición de radiación que su cuerpo había sido expuesto a altas dosis de material radiactivo. Activados los dispositivos de seguridad, se concluyó que la botella de agua personal que estaba en su propia oficina había sufrido la alteración del líquido con agua pesada del reactor.

Desde nuestra Federación expresamos nuestra profunda preocupación entendiendo que estos hechos se dan en el marco de un “clima de época” donde desde los más altos niveles del poder político se insiste en un discurso agresivo de descalificación contra los trabajadores y sus organizaciones gremiales, cuyos efectos de deterioro sobre la calidad democrática de la vida en nuestro país son cada vez más evidentes.

Exigimos a todos los niveles del Estado que garanticen el inmediato esclarecimiento de ambos hechos, el resguardo de la integridad psicofísica de los compañeros, y el pleno ejercicio de los derechos democráticos de organización sindical y huelga.

Comisión Directiva

Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina

F.T.C.I.O.D y A.R.A.