Jueves 1° de diciembre de 2016 | Entre ayer y hoy se realizó en la ciudad de Rosario el 66º Congreso Ordinario de la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina, en el cual se trataron importantes temas vinculados a la política gremial de nuestra organización.

Entre los mismos, tuvo particular relevancia la decisión de los delegados congresales de mandatar a los paritarios en relación a tres puntos: 1) demandar una suma no remunerativa extraordinaria de $25.000 (que mediáticamente se acostumbra denominar “bono”, y que nosotros imputamos año tras año como participación en las ganancias), 2) realizar el reclamo formal de reapertura de la negociación paritaria salarial en defensa del Salario Mínimo Vital y Móvil según su definición legal en el artículo 14 bis de la Constitución Nacional y artículo 116 de la Ley de Contrato de Trabajo, y 3) recuperando un reclamo sostenido de los últimos años, rediscutir nuestro Convenio Colectivo de Trabajo para sumarle las categorías perdidas en su modificación del año 2005, entre otros aspectos, tomando el guante del planteo realizado públicamente por el Presidente de la Nación aunque con el espíritu de modificarlo para bien de los trabajadores, y no para el beneficio de las patronales. Asimismo, se mandató a los paritarios a disponer las medidas de fuerza que se consideren necesarias en función de la marcha de las negociaciones.

El transcurso del Congreso contó además con la realización de paneles dedicados al informe económico del sector a cargo de nuestro grupo de asesores conducido por Sergio Arelovich, mesa que contó además con un informe adicional sobre la coyuntura económica nacional por parte de Martín Schorr, sociólogo e investigador del Conicet, que dejó fuertes interrogantes sobre la viabilidad económica y social de las principales políticas que se encuentra aplicando el actual gobierno nacional.

Luego se realizó un panel dedicado a los Comités Mixtos de Salud y Seguridad en el Trabajo a cargo de nuestras asesoras legales Luciana Censi y María Paula Lozano, junto a Mariano Mussi, médico epidemiólogo y Esteban Fridman, psicólogo laboral, ambos asesores en salud del Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros de Rosario (SOEAR) y el abogado laboralista Eugenio Biafore. En el mismo se relató en detalle la experiencia de algunos de los Comités actualmente en funcionamiento, como el de la planta Dreyfus General Lagos, y se brindaron elementos tendientes a nacionalizar esta experiencia a partir de la incorporación de los Comités Mixtos a la última paritaria aceitera.

Los compañeros de nuestra Obra Social para el Personal de la Industria Aceitera, Desmotadora y Afines (OSIAD), realizaron posteriormente un informe en profundidad sobre las políticas que se vienen desarrollando desde su asunción tendientes a optimizar el funcionamiento, siempre desde un criterio solidario, dejando atrás el fuerte rojo en las cuentas con la que fue encontrada la institución, fortaleciendo y reequipando los centros de salud existentes, construyendo uno nuevo en el Gran Buenos Aires y desarrollando un nuevo programa de prevención en el interior de las plantas, entre otros aspectos.

También se realizó la elección de la Junta Electoral para los comicios del próximo año donde se renovará la conducción de nuestra Federación, por primera vez por voto directo de todas y todos los compañeros afiliados, gracias a la reciente reforma de nuestro Estatuto, en cumplimiento de las promesas realizadas antes y después de la asunción de la nueva conducción en el año 2013, para que con la mayor participación se limite el accionar potencial de las burocracias que puedan pretender alguna vez torcer ilegítimamente la volutad democrática de los trabajadores.

Además, contamos con la presencia de compañeros de otros sectores, destacándose en particular la del compañero Rafael Vargas, secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar del Ingenio Ledesma (Soeail) de Jujuy, que sufre la persecución del gobierno provincial en complicidad con la patronal de la familia Blaquier. Entre otras medidas, el Ministerio de Trabajo de Jujuy intentó obligar al sindicato azucarero que acatara una segunda conciliación obligatoria consecutiva (fuera de los términos previstos por la ley) y, al iniciar los trabajadores una huelga, le aplicó al gremio una multa de dos millones y medio de pesos. Además, el propio Vargas ha recibido una condena a cumplir servicios comunitarios por 18 meses a partir de una denuncia penal de los Blaquier por haber realizado huelga. Los delegados congresales expresaron su apoyo y saludaron a los compañeros azucareros al grito de “Unidad de los trabajadores”.

Quedó formulado el fuerte compromiso de todos los presentes con la profundización de la democracia sindical en nuestra organización y la firma defensa del Salario Mínimo Vital y Móvil según su definición legal, construyendo conciencia obrera en unidad y solidaridad. Más pronto que tarde nos encontrará la coyuntura a los trabajadores aceiteros y desmotadores poniendo el cuerpo, el esfuerzo y la voluntad para la defensa de todos los legítimos derechos obtenidos y la conquista de los logros que aún nos faltan.

Fotografías: Sofía Alberti.

Prensa F.T.C.I.O.D y A.R.A.